martes, 6 de diciembre de 2011

HOMN habla


Casi nunca dijo ni una palabra, pero nadie se ha olvidado de él. Carel Struycken fue Mr. Homn, el asistente personal (siempre leal, siempre servil, siempre silencioso) de Lwaxana Troi (Majel Barrret-Roddenberry).

Homn apareció en cinco episodios de TNG: “Haven”, “Manhunt”, “Menage á Troi” (N. de K: guarda con la fuente, que en el texto manda Troii, error), “Half a Life” y “Cost of Living”, y mayormente se comunicó por lenguaje de señas, aunque en “Haven” dijo… una línea de diálogo. Muchos trekkers recordarán que también hizo de El Espectro en “The Thaw”, el capítulo de VOY (Segunda Temporada).

Más allá de ST, Struycken se hizo famoso como “Largo” en La familia Addams, pero otros de sus trabajos también resultaron conocidos: estuvo en Twin Peaks (hizo del Gigante, obviamente: mide 2.13 m), en Men in Black, en Charmed y en Cold Case. (N. de K.: Muy pocos saben que también estuvo en el film de Sgt. Pepper Lonely Heart’s Club Band, 1978). ¿Y qué está haciendo ahora? Sigue apareciendo en convenciones, sí, pero se dedica a la videografía y a la fotografía interactiva...

Cuando lo llamaron para trabajar en TNG, no fue para que interpretara a Mr. Homn, ¿verdad?

Me querían para hacer una escena, solamente. Yo tenía cierta conexión con Star Trek porque cuando llegué a los Estados Unidos (N. de K.: Struycken es holandés) una de las primeras cosas que vi en la tevé norteamericana fue TOS. Me voló la cabeza. Era tan extraña... pero los guiones eran fantásticos, poderosos, únicos. Así que cuando me llamaron de TNG, de pronto sentí que pertenecía a ese universo y quería algo más que una escena sola… Les dije: “Me gustaría un personaje concreto; creo que pertenezco aquí”. Y así fue. No me echaron. Me dijeron: “OK”, y me dieron a Mr. Homn. En serio, esto no fue una cosa de negocios. Fue algo desde el corazón.

¿Qué fue lo que más le gustó del personaje de Homn?

Las dos Troi se las arreglaban muy bien con la comunicación no verbal. Cuando vi aquello, me di cuenta de que yo tendría muy poco para decir. Me dieron una línea de diálogo en mi primer capítulo y después no había nada más; eso me desilusionó, pero pensé: “Bueno, puedo justificarlo pensando que, en el planeta de donde vengo, no abrimos las bocas cuando hablamos”. Así que, en mi cabeza, yo tenía largas charlas con Lwaxana y Deanna pero vos, como espectador, ni te dabas cuenta.

¿Qué recuerdos atesora de su trabajo con Majel Barrett-Roddenberry?

Ella era absolutamente fabulosa, fantástica. Por lo general, cuando estás en la sala de maquillaje, los actores son reservados, hablan poco, se guardan lo que piensan… pero Majel no era así. Decía lo que pensaba, y se aseguraba de que todos nosotros supiéramos qué cosa pensaba. Eso era genial. Y, hasta donde pude conocer a Majel fuera de escena, mucho del personaje de Lwaxana era la Majel de verdad.

Usted regresó a Star Trek varios años después para “The Thaw”, poniendo su voz. ¿Cómo surgió aquello?

En realidad, me perdí de una o dos oportunidades de seguir en TNG porque estaba filmando La familia Addams; fue algo frustrante: podría haber hecho ambas sin problemas, porque el set donde filmábamos los Addams con la Paramount estaba literalmente enfrente de donde se filmaba TNG, pero no dio. Después estuvo la posibilidad de participar en Voyager y me pusieron en la cabeza un zapallo negro muy extraño… era sólo un papel chiquito pero, por decirlo de algún modo, me encantó volver al espacio exterior.

Cuando usted iba a las convenciones, llevaba consigo a toda su familia a firmar autógrafos. ¿Qué pasa ahora, después de tantos años?

Bueno, yo disfruto mucho de las convenciones, pero a mis hijos no les convencen para nada. Igual, me parece divertido llevarlos… Mi hija empezó a cursar Medicina, así que no creo que me acompañe nunca más a las convenciones; mi hijo está postulándose para Medicina, también… Igual: cuando voy a una convención y después de estar sentado por dos o tres horas a la mesa, ya tengo ganas de rajarme y mi hijo, que se sienta a mi lado, me dice: “No, no te levantes, vinimos para esto, quedáte”… Él es mi guardián.

¿Qué anda haciendo ahora?

Estoy poniendo a punto una isla de edición. Acabamos de comprar una casa en Los Ángeles y voy a convertir el garaje en mi taller: es un espacio grande donde puedo dedicarme a la fotografía y edición de video.

¿A qué clase de fotografía se dedica usted?

En realidad, hago casi exclusivamete panoramas esféricos, que pueden ver aquí. Fíjense... Es un trabajo interesante. Y ahora que conseguí este garaje, puedo trabajar en pequeños retratos y en otras cosas. Voy a experimentar.

¿Sigue actuando?

Ah… bueno. Trabajar como actor es una actividad pasiva, en cierto punto, porque tenés que esperar a que alguien te llame. No hay mucho que puedas hacer, sólo esperar que suene tu teléfono. Una vez que termine mi isla de edición, voy a hacer una buena recopilación de mis obras, y ahí vemos. Ahí van a verme.

Fuente: Guia ST
Traducción y resumen: Kohelles

No hay comentarios: