Sir Patrick Stewart en cinco minutos.

BBC.co.uk subió una entrevista en video a Patrick Stewart, realizada por Matthew Stadlen, que puede verse aquí.

En medio de sonidos de calle -el periodista avisa que molestarán en algún momento de la charla (incluso aparece luego la sirena de una ambulancia)-, Stewart dijo, entre muchas otras cosas, que hace scuba diving; que en lo que respecta a la música es una bestia –adora su un piano Yamaha que “se toca solo”, computarizado- pero que está aprendiendo a tocar la armónica, aunque le sale muy mal; que participó en nada menos que en… ¡veintiocho! de las 37 obras de teatro conocidas de Shakespeare; que reconoce que su profesora de Literatura le dio buenos consejos cuando tenía 12 años…; que le habían dicho que jamás sería un líder y que, de chico, su maestra de actuación le hizo entender que sus primeros veinte años como actor serían muy difíciles. Pero, confesó, “el escenario (de un teatro), para mí, fue el único sitio seguro que encontré en el mundo real. Y todavía lo sigue siendo”. 

“Cuando estoy en escena (en teatro) me siento un gigante. No me siento así en la vida verdadera: cuando estoy sobre un escenario, pienso que puedo hacerlo todo.”

¿Se pone nervioso?

No. Me asusto (sonríe), pero no me pongo nervioso. 


En 1:22 (en esta cuenta atras de los cinco minutos, marcado en pantalla en el video), el periodista le pregunta acerca de Star Trek. Ahí Stewart dice que TNG le “cambió todo”, tanto en su vida como en su carrera. 

“En 1987, cuando fui a Hollywood para comenzar a filmar Star Trek: The Next Generation, nadie que no supiera de la Royal Shakespearan Company había oído jamás mi nombre. Después del enorme éxito de la serie, que fue inmediato, todo cambió para mí”.


¿Cómo diría que se siente, en una sola frase?

Feliz… y entusiasmado con el futuro.

¿Qué tan importante terminó resultando su voz?

Parece que fue algo importante; durante mucho tiempo no lo advertí, todavía no me doy cuenta del todo. Pero mi voz es reconocible. Me pongo una gorra de béisbol y lentes oscuros y pienso que los trekkers no se van a dar cuenta de quién soy, pero…
Y cuando se cumplen los cinco minutos, apurando, casi grita:

“¡Amo las películas, pero mi vida es el teatro!"


Fuente: Guia ST

Traducción y redacción: KOHELLES